En cada nativo de los signos del zodiaco hay una inclinación a vivir el amor de una manera determinada, y se producen una serie de situaciones de acuerdo a las inclinaciones y tendencias que manifiestan. Pero hay que saber que cuando se habla de características de signos siempre se trata de generalidades.
El amor en los signos del zodiaco
Aries
Raramente existe un profundo enamoramiento en los nacidos bajo este signo. Aunque tienden a idealizar cuando se apegan a alguien, pronto se dan cuenta también de sus defectos y se les cae del pedestal. Eso sí, son muy apasionados, y rivalizan por ser los que tienen más atractivo o que conquistan más, y si hay algún enemigo o enemiga, son capaces hasta de batirse en duelo.
Querrán sobre todo satisfacer su sed de aventuras, aunque a veces, si su compañero es muy afín, y pueden enfadarse y reconciliarse sin que pase nada grave, es posible que se vinculen más hondamente.
Tauro
Este signo es muy laborioso, en todo, y a su pareja la cuida mucho, por lo que no aceptará reproches ni desaires. Aunque no lo aparenten, son muy sensibles, y necesitan el reconocimiento por lo que dicen y hacen, y esta es una buena manera de ganárselos. Quieren sentirse protegidos, pero también protagonistas en sus relaciones, en las que reine la paz, el afecto y la armonía.
Necesitan tanto la seguridad, que cualquier amenaza o duda les puede hacer perder el control de sus emociones y la ilusión por su pareja.
Géminis
En estas personas se produce una dualidad. O bien se muestran frías, aunque amistosas y simpáticas, o se vuelcan tremendamente en la persona de la que creen que están enamorados, sea verdad o no, porque a veces confunden una gran afinidad sexual o amistosa con el verdadero amor. Si alguien está interesado en ellos ha de evitar sobre todo el aburrimiento y la monotonía, que aplastan literalmente su espíritu.
Cuando está ilusionado con alguien, es muy fértil en declaraciones, cartas, poesías, mensajes y regalos, y le gusta viajar con la persona de sus sueños, sobre todo, descubriendo lugares nuevos.
Cáncer
Son seres a los que les encanta, lo confiesen o no, el romanticismo, y que en numerosas ocasiones viven afectivamente encadenados al pasado, reciente o remoto. Su buena memoria les hace recordar el cariño pretérito, y las adoradas caricias. Les gusta ir como caballeros andantes en busca de su Dulcinea, aunque esta solo esté en sus sueños, y ellas sueñan con un príncipe. Pero cuando encuentran a la persona adecuada se convierten en personas pragmáticas que velan por el bienestar de su hogar.
Caprichosos, susceptibles y sentimentales, son poco objetivos y a veces imaginan afrentas donde no las hay.
Leo
Los nativos de este signo se entregan con autentico apasionamiento a todo lo que hacen, y el amor, y todo lo que conlleva como reconocimiento, aceptación, valoración, comprensión, y por supuesto sexo, los motiva profundamente. Ellas y ellos quieren gustar de verdad, sentirse importantes para su persona elegida y que normalmente ponen en un pedestal. Son generosos y cordiales, un tanto autoritarios y posesivos, con mal carácter ocasional que intentan remediar al poco tiempo de producirse.
Quieren ir hacia el sol en un barco lujoso que les haga percibir que la vida realmente merece la pena vivirse con intensidad.
Virgo
Las personas nacidas bajo este signo son tímidas a la hora de abrirse emocionalmente, aunque les gusta compartir intereses, y sin bien soportan la soledad, prefieren el calor sentimental que proporciona el afecto. No son muy románticos, aunque si les da la vena apasionada porque creen que han descubierto a alguien especial, lo que les cuesta mucho porque son observadores minuciosos y exigentes, se desatan en un vehemente furor amatorio. Necesitan personas cariñosas y valorativas que les hagan soltarse y exteriorizar su fino sentido del humor, que hace que les brote la alegría y la espontaneidad. Son celosos porque no soportan que su ordenado mundo se desmorone.
Libra
Para este signo, el amor no es un asunto más de su vida, es toda su vida. Estas personas nacen para establecer vínculos y acuerdos, aunque de una manera no muy apegada. Es un signo de aire, y por lo tanto mental, por lo que el amor lo ven como un acuerdo con beneficio mutuo, pero por supuesto tienen corazón y buscan a personas educadas y con altos valores, dándole mucha importancia a la estética.
Ellos y ellas necesitan ser comprendidos en su faceta un tanto escéptica y en la que dudan de todo. ¿De verdad eso es así?, es la pregunta constante de Libra para la que no suele encontrar verdades certeras. Muchos se enamoran del amor, en lo que tiene de afecto, intercambio inteligente de ideas y apasionamiento, y no quieren saber nada de incomodidades.
Escorpio
Son personas tormentosas y complicadas en el amor, dan mucho y exigen casi todo. De fuerte temperamento e intensidad emocional, suelen hipnotizar a las personas que desean con un magnetismo muy fuerte, y una aparente gran seguridad. La sexualidad es vital para ellos y ellas. A través de esta función, descargan su potencial emocional y experimentan sensaciones a las que muchas veces son adictos. No muy cariñosos ni afectivos, sí son protectores porque a su ser querido lo consideran “suyo”. A veces se enamoran de lo inalcanzable, o de lo que se le pone muy difícil, y pueden tener una relación sadomasoquista con el sufrimiento.
Si se hunden por la pérdida de una persona querida, resurgen pasado un tiempo con más fuerza que antes y más determinación.
Sagitario
Muy vitalistas y bastante vividores, casi todo se lo toman como un juego, por lo menos hasta que las cosas no se ponen mal, y si es así empiezan a desarrollar más convencionalismo y seriedad, pero si surge la oportunidad optarán por todo lo que les proporcione disfrute y euforia. Expansivos, generosos y cordiales, son fáciles de querer, aunque a veces su franqueza un tanto inoportuna les haga perder puntos ante su pareja, pero siempre reaccionan con una broma y su permanente sonrisa. Les importa bastante la opinión de los demás y gozar de respetabilidad por lo que harán todo lo posible porque sus relaciones vayan bien, y estén integradas en un entorno social elevado. Les gusta también la filosofía y el altruismo, y es posible que se enamoren de personas con estas aficiones y cualidades. No soportan lo excesivamente pragmático.
Capricornio
Sumamente prudentes y cautelosos, evalúan todos los riesgos antes de reconocer que lo que sienten es enamoramiento por una persona. La lealtad es para ellos una de las pruebas irrefutables del deseo de vinculación. Son sabios y sagaces, saben esperar y ser pacientes, y a su manera un tanto pesimista son realistas, por lo que son escasos sus desengaños. Pero ocurre que parte de sus vínculos son por interés, sin que haya una verdadera y profunda interacción emocional, por lo que a menudo la relación se queda sin energía, ya que, además, a pesar de ser sensatos y razonables, necesitan una buena dosis de imaginación y romanticismo para conquistar a su ser querido.
Acuario
A los nativos de este signo les gusta mucho la interacción social y las relaciones de pareja, pero también la soledad, en la que tiene tiempo para dejar que su mente vuele hacia lejanos horizontes. Los que quieran estar con un Acuario tienen que respetarlos mucho, en su individualidad, su excentricidad y extravagancia y en su deseo de vivir cosas que a ellos y ellas les perecen fascinantes. Suelen tener muchas rupturas y separaciones porque son difíciles de entender y un tanto fríos. Buscan sobre todo un camarada, un colega de aventuraras físicas o mentales al que no le importen los convencionalismos. Experimentan el amor desde un plano más mental que emocional.
Piscis
Estas personas son muy sensibles y altruistas, compasivos, románticos y amorosos, pero un tanto confusos y con una individualidad poco marcada. A menudo soñadores, pueden entregarse a relaciones imposibles o vivir en la dependencia emocional. Les cuesta marcar límites y ser racionales por lo que si dan con buenas personas pueden tener una relación de aprecio mutuo, pero si no es así les costará defenderse y a menudo recurrirán a terceras personas para que les apoyen. Un tanto sufridores y víctimas, les cuesta quitarse responsabilidades de encima y decir que no, por lo que algunos pueden abusar de su buena voluntad. Poco fieles, les cuesta decir la verdad si piensan que eso les va a traer malas consecuencias en las relaciones.
