SIGNO CÁNCER

Características del signo

Son del signo Cáncer los nacidos entre el 21 de junio y el 20 de julio. Su color es el plateado, su piedra el ágata, y la carta del tarot asociada «El Carro». El mejor momento para reconocer a Cáncer es de noche, cuando salen a soñar, envueltos en su vívida imaginación. La luz de la Luna les sienta estupendamente, armoniza sus múltiples estados de ánimo y aviva sus emociones cambiantes.

Los estados de ánimo pasajeros de Cáncer están sincronizados con la Luna y responden a la misma misteriosa influencia lunar que rige el movimiento de las mareas en el océano. Sin embargo, la Luna no cambia, únicamente lo parece. Igualmente, Cáncer sigue siendo la misma persona pese a todos sus altibajos.

Su carácter y comportamiento

Es posible que en un primer contacto nos lo encontremos riéndose con su extravagante risa lunar, irresistiblemente contagiosa. Los nativos de este signo tienen un agudo sentido del humor, que se basa en la observación profunda del comportamiento humano. Es especialmente divertido cuando deja volar su imaginación, ya que se le ocurren mil y una extravagancias y es buen contador de chistes por su buena memoria. Además, su sentido del humor irrumpe la mayoría de las veces de manera inesperada, por lo que además produce sorpresa.

Es posible que Cáncer no se ponga todos los días su risa lunar, pero siempre puede sacarla en un abrir y cerrar de ojos de su viejo baúl de anécdotas. No son personas que se desvivan por ser el centro de atención. A veces se muestran un poco o un mucho tímidos y retraídos, pero les gusta la publicidad y la fama ya que esta les hace sentirse queridos y esto es sin duda muy importante para Cáncer; le ayuda a superar sus estados melancólicos que se derivan de una vaga sensación de peligro.

Nunca muy lejano, el pesimismo estará siempre dispuesto a frustrar los hermosos vuelos de su fantasía. Sus miedos constituyen el Talón de Aquiles que le duele cada vez que intenta volar demasiado alto. Sus lágrimas nunca son falsas, fluyen de los profundos ríos de su corazón, frágil y vulnerable. Con una mirada dura o un tono de voz áspero puedes herir sus delicados sentimientos y la crueldad o la agresividad pueden llenarle los ojos de lágrimas o inducirle a un completo retraimiento. En estas ocasiones no es fácil ver a Cáncer, ya que desaparece en un silencio lleno de reproche.

Hay otro estado de ánimo propio de Cáncer: el malhumor. En estas ocasiones, preguntarle la hora o pedirle la sal puede ser un ejercicio de riesgo, ya que responderá con agresividad. No es que esté enojado con nadie en particular, es que está desilusionado con la vida. Hay que esperar a que se le pase y volverá a ser la persona dulce, suave y comprensiva que normalmente es.

Físicamente, podemos reconocer a Cáncer por sus dos tipos básicos: uno de ellos tiene un agradable rostro redondo, la piel suave, la boca grande y sonriente, los ojos casi circulares; más bien el aspecto de un bebé. El otro tipo es el más común: en su rostro se observa inmediatamente el inconfundible aspecto del cangrejo, con un cráneo bastante grande, de cejas salientes y pómulos altos. Es posible que las cejas den la impresión de estar permanentemente trabadas en un ceño que, cosa rara, no es ofensivo sino más bien interesante. La mandíbula inferior es pronunciada y los dientes prominentes o de alguna manera desiguales. Los ojos, normalmente pequeños, están bastante apartados. En cuanto a su cuerpo, los brazos y las piernas suelen ser excepcionalmente largos en relación con el resto del cuerpo y las caderas bastante anchas.

Todos los regidos por la Luna tienen un rostro enormemente expresivo. Mil estados de ánimo se perfilan fugazmente en el curso de una conversación y, dado que tienen un gran dominio sobre las imágenes mentales y sus emociones son tan intensas, pueden hacer que los demás las sientan. También son enormemente cautelosos y aprenden mucho de sus experiencias, lo que les proporciona un talante maduro y profundo que hace que los demás les confíen sus secretos; pero la sensibilidad de Cáncer les permite conocerlos sin que hayan mediado las palabras.

LA MUJER CÁNCER

Cómo reconocerla

Existen dos tipos básicos de mujeres Cáncer. El primero tiene un agradable rostro redondo, la piel suave, la boca grande y sonriente, los ojos casi circulares, más bien el aspecto de un bebé. El segundo tipo es más común. El cráneo es bastante grande, de cejas salientes y pómulos altos.

Es posible que las cejas den la impresión de estar permanentemente trabadas en un ceño que no es ofensivo, sino más bien interesante. La mirada es extraña, soñadora y cautivante.La mandíbula inferior es pronunciada y los dientes prominentes o de alguna manera desiguales. Los brazos y piernas suelen ser largos y finos y los hombros más anchos de lo habitual. Todas las regidas por la Luna tienen un rostro enormemente expresivo. Mil estados de ánimo se perfilan fugazmente en sus facciones en el curso de una conversación.

Las áreas más vulnerables son el pecho, las rodillas, riñones y piel. La cabeza y la cara también son delicadas, lo mismo que el estómago y el sistema digestivo, que suele sufrir especialmente por su propensión a preocuparse. En la mujer Cáncer los estados anímicos se dibujan con claridad en su aspecto físico, por lo que es muy aconsejable que aprenda a relajarse, lo que consigue en un hogar con armonía. Sus dos tendencias fundamentales son la vida bohemia, experimentar sensaciones y vivir todo tipo de experiencias y por otro lado la tendencia a dirigir una casa ordenada en la que desempeñen el papel de “la gran madre protectora”.